Haiti parece Somalia: la venganza del sumidero
Mordiéndome los dedos para que no escriban todo lo que sienten sino lo que deben me abro de capote frente a este post. Por delante, por supuestísimo, toda la solidaridad (y más), todo el dolor (y más), y algo de esperanza (y ojalá más). Después…: rabia y pena, indignación y vergüenza.
Las imágenes que llegan en tsunami desde Haiti no se parecen en casi nada a las que llegaron a puñados de cualquier otra tragedia natural. Además del espanto por las consecuencias de la furia sísmica, además del escalofrío por la despiada venganza de la madre tierra…, además, lo que estamos viendo y sufriendo es el caos, la violencia, la anarquia, el descontrol, el pillaje, el saqueo: la muerte muerta y la muerte viva.
Retratos y secuencias que desgraciadamente recuerdan guerra, refriega, conflicto…: apocalipsis. Estampas e instantes llenos de gestos y miradas nacidas dentro de la devastación y en medio de la destrucción que me recuerdan a Somalia. ¡Hasta hay marines ejerciendo de séptimo de caballeria! Terrible.
Sí que es cierto que el mundo se vuelca para intentar paliar tanto infierno, pero no es meno
s cierto que esa actitud esconde un gigantesco cargo de conciencia porque ese mismo mundo convirtió sistemáticamente a Haiti en uno de sus sumideros. Y los sumideros, ya se sabe, cuando dejan de tragar escupen toda la mierda que en ellos se metió. Eso es lo que está pasando: es la venganza del sumidero.
Dos reflexiones finales. La primera dirigida al mismo epicentro de las conciencias: ¿cuántos más Haitis hay, cuántos más sumideros hemos construido y alimentado y ahora mismo pueden estar pergeñando venganzas?. Y dos: esta bestial desgracia le ha venido a huevo a un montón de dirigentes mundiales, con Obama a la cabeza, que ahora se han puesto representar el papel de salvadores para tapar la vergüenza que ellos perpetraron, y para al mismo tiempo recomponer su imagen ajada por la crisis. ¡Qué enorme indecencia!
Por todo ello, volquémonos al máximo con Haiti pero al tiempo empleémonos a fondo para que no vuelva a haber más Haitis.
A cuidarse!!!
