Manada de mamarrachos
…de mamarrachos e impresentables…
Al frente de la manada, hoy, y por lo mucho que se lo han currado, el yanki y el chino que se han juntado cerquita de la muralla para enrocarse en su reparto del mundo. Lo han hecho sin miramientos, sin pudor… con dos cojones. Y no sólo lo han hecho sino que han presumido de ello mostrando a las claras que una vez más, como siempre, pisotean libertades y derechos empezando por el libre derecho de todos a tener un medio ambiente sano y duradero. A ellos también eso se la pela, ellos se han «arrejuntado» cerquita de la muralla (qué simbólico) para extenderlo(el nos la pela) por todos los confines de sus imperios gritando a los cuatro vientos (que por cierto también se los han apropiado) que el mundo va a seguir siendo suyo reconfirmado así que han vuelto a repartírselo.
Ellos dos por tanto al frente y en segunda posición, a muy corta distancia, MariaJob Rajoy y su cofradía de los gurPPelianos. Poseidos como están por la mentira, la prepotencia, y el «me la pelais todos», se lanzan por enésima vez al carroñerismo pasándose por el forro de los cojones (por enésima vez) el sentido común, la decencia, y el respeto. Son los gurPPelianos que se retratan en ferraris, cual Pepe Gotera y Otilia de diseño gracias al pelotazo, burlandose de los cientos y cientos de miles de rehenes de la crisis. Son los gurPPelianos que acusan con frenesí a todo quisqui de espiarles cuando está más que demostrado que ellos son los auténticos y fidedignos anacletos. Son los gurPPelianos, cofradia impresentable doctorada cum laude en hurgar en las desgracias sin el más mínimo miramiento al punto incluso de meter sus garras en la tragedia (ahora ex-tragedia, por fortuna) del Alakrana.
Y luego están los demás, el resto,… casi todos. Los que anteponen las matemáticas a los principios. Los que anteponen su bienestar (lease su bolsillo) a sus principios. Los que anteponen su con-sentido común a sus principios. Los que anteponen su autoritarismo congénito, trabajosamente disimulado pero visible sin esfuerzo, a sus principios. Los que no se la chupan porque no llegan y a cambio ingenian estrategias constantemente para que sean los demás los que se la chupen aunque ni ellos mismos lo puedan gozar de forma directa. Los que …….
Unos, otros, y el resto SÍ consiguen día a día, casi minuto a minuto, convertirse en el más eficaz repelente que jamás se soñó siquiera inventar. Saben que juegan con fuego pero también eso se la pela porque están consiguiendo que al otro lado haya repulsión pero también resignación. ¡Manada de mamarrachos e impresentables! ¡Qué lástima!
A cuidarse!!!