Dic 29 2009

¡Adiós, nueve cabrón!

Como diría la abuela de Charolito, «tanta gloria lleves como paz nos dejas»… Charolito, diplomático lo justo, escupe una especie de sinónimo y lo encarama a titular: «¡adiós, nueve cabrón!»… Y añade…: «vete ya de una puta vez».

El nueve (cabrón) puede ser resumido en el momento de balancearlo con apenas dos palabras: decepción y engaño. Sus porqués son varios, a saber:

-decepcionó y engañó Obama que comunicar lo hace como nadie pero hacer lo que se dice hacer… pues de momento «kas». Guatánamo sigue y seguirá aunque con otro nombre y en Illinois. En Irak se sigue matando y malviviendo como hasta ahora porque nada cambió (él), y en Afganistán se matará y se morirá aún más porque (él) en vez de más paz se ha enviado y envía más guerra. Además, y por si fuera poco, ahora fija en su diana a Yemen y de paso anuncia que meterá policías (sherifs) en los aviones. Es Obama, el Premio Nobel de la Paz (????).

-decepcionó y engañó el paripé climático de Copenhague de donde no salió más y mejor medioambiente, y sí mucho autoritarismo indiferente y egoísta. La prueba está que si preguntas por conclusiones de la cumbre no encontrarás como respuestas más que la violentísima e irracional actuación policial, y el anacrónico encarcelamiento de López de Uralde de quién por cierto no se escucha a la autoridá ninguna acción o gestión para que le sea devuelta la libertad (las libertades) que le fueron robadas.

-decepcionó y engañó la cofradía de los gurPPelianos que ni han hecho ni han dejado hacer,aunque sí han hecho mucha pasta y han dejado hacer enormes negocios. El caso fue mucho caso pero de pronto dejó de serlo lo que sugiere la sospecha (todo lo sospechoso es probable) de algún tipo de cambalche en la línea de que lo mismo son muchos y son más los apandadores y beneficiarios y por eso lo mejor es dejarlo pasar y aquí paz y después gloria. Qué asco.

-decepcionó y engañó el cómo se gestionó la crisis insaciable y despiadada. Las medidas que se tomaron fueron carroñeadas con insultante voracidad de tal modo que una vez más fueron pocos los beneficiados y muchos (muchísimos) los perjudicados y damnificados. Tan es así que, para mayor vergüenza universal, el provecho de unos pocos ha sido mayor que la desgracia de muchísimos. Los ricos son tan ricos como antes, o lo mismo un poco más; se mantienen o crecen los que ocultan sus tesoros en las SICAV y presumen de ello sin que nadie haga nada; y los empresarios se lamentan y lloriquean pero no sólo no bajan los precios sino que se pavonean de incumplir sus obligaciones con todos (a través del estado) y venden lo que ya no tienen pero quedándose con la pasta (¿verdad Gerardo?).

-decepcionó y engañó la sanidad universal (planetaria que diría alguien) con la gripe A que no fue tan asesina como se dijo pero que sí sirvió para que se enriquecieran los de siempre sin que nadie se ruborizase siquiera viendo cómo se gastó un pastizal (y se pagó) para ahora no usarlo y guardarlo (si no tirarlo), porque el dinero no se devuelve y si te he visto no me acuerdo.

-…..

Podríamos seguir hasta el infinito (y más allá) pero no es el caso porque no es bueno que me abandonen mis neuronas y mis escrúpulos. Sí es cierto que también hubo «güeno» pero ya se sabe que lo bueno no vende. Vende lo malo y lo peor, y tienen caras (lo malo y lo peor) que son y serán duras pero también amplias para recrearse partiéndolas cuando llegue la ocasión (que llegará): las de quienes parecieron de fiar y no lo fueron demostrando que lo que parece nunca es, y las de quienes fueron de fiar hasta que se afanaron con celeridad y sin miramientos en dejar de serlo. Triste tristísimo pero como dicen un refrán y Charolito: la vida termina poniendo a cada cuál en su sitio, y el que tiene la moneda la cambia.

¡Adiós, nueve cabrón! Vete cuanto antes y sé borrado y extinguido. Te lo ganaste a pulso. En cuanto al diez…: ¡que devuelva lo que el nueve robó!

A cuidarse!!!

 


Dic 7 2009

Copenhague, la hora de la verdad

Ser esceptico es ser realista. Ser pesimista es ser realista. Ser realista es saber que usarán la coartada del cornalón económico mundial. Ser realista es saber que a ellos sólo les importa ellos.

Así es la realidad pero en ella caben otros conceptos. Por ejemplo, y sobre todo, que ilusionarse es puro instinto de supervivencia y que frente a ese instinto no existen utopías ni sueños ni quimeras sino realidades posibles y alcanzables. Porque el instinto de supervivencia es justo lo que está ejerciendo y aplicando la madre tierra aún a costa de llevarse por delante a justos y pecadores.

Esto sí va de bandos y está claro como el agua clara (la que aún queda) en qué bando NO hay que estar.

 

cambio-climatico

 

Hoy debes leer esto. Un gesto sí pero también un manojo de (más) argumentos para rebelarse y un puñaíto de razones para no resignarse:

www.elpais.com/articulo/sociedad/Frente/grave/emergencia/elpepisoc/20091207elpepisoc_7/Tes

 A cuidarse!!!

PD: se está produciendo un curioso pero inquietante déjà vu en la actualidad política. Mañana (o pasado) lo comentaremos.