La trama de espias descubre la cara real del PP

Tanto tiempo disimulando, casi encubriendo, y vienen ahora los «anacletos» de «mi» Espe y desvelan la cara real del PP. No lo han hecho directamente, que también, sino que ha sido el principal efecto colateral del «golpe» de «mi» Espe para sepultar la comisión parlamentaria de investigación. Esa que no ha servido para nada, ni siquiera para desviar la atención y vaya el empeño que pusieron en ello.

«Mi» Espe volvió a tirar por enésima vez de su mayoría absolutísima para fusilar la citada comisión y desde la génesis al epílogo de la tal pantomina, pasando por su escasísima vida, han quedado demostradas todas y cada una de las facciones de este PP. A saber:

-la mentira. En la que viven, la que alimentan, y la que manu militari intentan inyectar un día sí y otro también a todos. Gentes que nuevamente responderemos con el estribillo de «por ahí no pasamos».

-el insulto. El que les brota por cada poro de su piel y que dedican no sólo a particulares sino a la totalidad en tanto que con el paripé de la Asamblea han dado una clase magistral del insulto a las instituciones.

-la soberbia y la prepotencia. Que circula por sus venas con tal ímpetu que a cada poco se convierte en hemorragias. Soberbia y prepotencia que han convertido, hace ya mucho, en petenera: «todo es mentira, nada es real, sólo sirve y vale lo que nosotros decimos».

-la impunidad. O dicho en «coloquial», el me la pela. Sientense tocados por a saber qué dioses y haciendo de ello tradición, y fieles a la misma, les da igual absolutamente todo si les afecta. Si es de cualquier otro entonces ya no y ese otro tendrá que demostrar su inocencia cuando es quien acusa quien debe demostrar la culpabilidad.

-el autoritarismo. O el abuso de poder. Se vió cuando lo de Lamela y el Severo Ochoa; se ha vuelto a ver ahora, tanto con lo de los espias como con lo otro, la corrupción masiva.

Esa es y así es la cara real del PP que ya hace mucho conocíamos pero que ahora ha sido pintada de colores por la trama de los espias. Convendría no olvidar ni uno sólo de los epígrafes porque se repetirán exponencialmente a lo largo de todos los próximos minutos. La mentira, el insulto, la soberbia y la prepotencia, la impunidad y el autoritarismo.

 

PD: hoy, por fin, está en marcha «la discoteca de El Foro de Charolito». Abren, no podía ser de otra forma, mis amigos de La Excepción con uno de sus nuevos temas. Feliciades Langui, Gitano, Arturo, y los colegas del panben.